Desde esta ventana que nos brinda la tecnología, hemos querido invitaros en más de una ocasión (aquí y aquí) a que disfrutéis de las magníficas virtudes del entorno natural privilegiado del que goza nuestra tierra. Hoy os proponemos algo muy concreto, la berrea de los ciervos.
Posiblemente, se trate de unos de los espectáculos más bonitos que se pueden encontrar en la naturaleza, y también uno de los más accesibles, tan solo hay que tener buen oído y ganas de pasar un atardecer único.
Con la llegada del otoño, a finales de septiembre y comienzos de octubre, los ciervos comienzan su ritual de apareamiento. Lucen sus mejores cornamentas con orgullo y llenan los bosques con excitantes sonidos, en busca de un harén de hembras a las que transmitir su material genético.
El silencio de la noche se ve roto tan solo por los bramidos y los golpes sus cuernas, resultado del enfrentamiento con otros machos, en una búsqueda incesante por asegurar la descendencia. Es una lucha por el poder, por la jerarquía, con un único propósito: el nacimiento de las crías allá por el mes de mayo.
Sin duda se trata de una de las experiencias más recomendables que se pueden desarrollar en esta época del año, y que se puede disfrutar en numerosos puntos de la geografía nacional, y por supuesto en Andalucía. El Parque Natural de los Alcornocales, el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla o el Parque Natural Sierra de Cardeña y Montoro, son algunos de los escenarios privilegiados dónde disfrutar de la función.
Si te gusta salir al campo y vivir la naturaleza en su estado más salvaje, desde IGNUS os animamos a poneros vuestras botas de montaña, agarrar una linterna y unos buenos prismáticos y disponeros a disfrutar del espectáculo.